Un apagón general dejó este martes a gran parte de la República Dominicana sin energía eléctrica, paralizando el transporte masivo, afectando servicios críticos y recordando, a golpe de oscuridad, la vulnerabilidad del sistema eléctrico.
Según la Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED), el fallo se originó a la 1:23 de la tarde en el sistema de transmisión, tras la salida de las unidades de generación de la Compañía de Electricidad de San Pedro de Macorís (CESPM) y de la Central Eléctrica Quisqueya. Esa avería provocó un disparo en cascada que sacó de servicio a AES Andrés y a otras plantas del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI).
El colapso dejó fuera de servicio el Metro de Santo Domingo y el Teleférico, obligando a evacuaciones y dejando a miles de usuarios varados. En avenidas como Hermanas Mirabal, muchas personas tuvieron que completar a pie largos tramos hacia Santo Domingo Norte entrada la noche.
Hospitales, bancos, comercios, pequeñas empresas y hogares también se vieron afectados. En Santo Domingo, el Distrito Nacional y Santiago se reportaron personas atrapadas en ascensores, semáforos fuera de servicio y un tránsito caótico. En el Estadio Cibao, el partido entre Águilas Cibaeñas y Gigantes del Cibao llegó incluso a jugarse a oscuras.
El ministro de Energía y Minas, Joel Santos, informó que hacia las 8:30 de la noche se habían integrado 1,442 megavatios de generación, equivalentes a cerca del 42.5 % de la demanda real del SENI, dentro de un proceso de recuperación progresiva. Zonas del Gran Santo Domingo, Santiago y otras provincias comenzaron a recibir energía de forma parcial conforme avanzaba la reconexión.
Para mitigar el impacto en la movilidad, las autoridades dispusieron transporte gratuito desde las 6:00 de la tarde en el Teleférico de Santiago y en el sistema de transporte de Los Alcarrizos, con operación extendida hasta la medianoche. Empresas, comercios y oficinas públicas recurrieron a inversores y plantas de emergencia para continuar operando.
Santos adelantó que se abrió una investigación formal para determinar las causas exactas del apagón, en coordinación con organismos especializados, incluido el Departamento Nacional de Investigaciones (DNI). El objetivo, afirmó, es establecer responsabilidades y evitar que un evento de esta magnitud vuelva a repetirse.
